La Oliva es el Ayuntamiento del norte y nuestro centro de actividades fue Corralejo, único lugar de Fuerteventura que conocíamos.
La Oliva
La Oliva es un pueblo pequeño donde está el Ayuntamiento del norte. Estuvimos ahí alrededor de las 14 hr y teníamos ya un poco de hambre. Tuvimos suerte que en la plaza hay un Quiosco que vende snacks y también Sandwichs, bebidas y cerveza, así es que hicimos una pausa para comer algo; la encargada fué muy amable pues nos hizo unos panes a nuestro gusto y nos regaló unas rosquillas que su mamá le hizo, un gesto muy lindo.
Tindaya
Desde el Mirador de Vallebrón se puede apreciar la montaña de Tindaya y el paisaje que la rodea. Al lado del mirador hay un cerro que me recordó a Jabba the Hutt, de Star Wars.
Corralejo
Hace 12 años estuvimos aquí hospedados sólo una noche, y vaya que ha cambiado. Nuestro departamento estaba al otro extremo del muelle y tenía una vista espectacular a la bahía, también tuvo comodidades poco frecuentes, como un exprimidor eléctrico, lo que hizo muy fácil tener jugo de naranjas fresco al desayuno y el baño tenía dos lavamanos y dos duchas, para nosotros dos fue mucho… pero para una familia de 4 ó 5 integrantes es práctico.
Después de ver el Amanecer y tomar fotografías, preparábamos el desayuno y veíamos como llegaba gente a la playa a hacer deporte, Yoga y los que desde temprano circulaban paseando sus perritos. Corralejo tomaba vida, los Ferry comenzaban a llegar a partir de las 8 am desde Lanzarote, que está a sólo 30 min, así es que el movimiento de turistas y habitantes entre las islas es alto, hay frecuencia cada 30 min. y son tres firmas las que trabajan en ello.
La bahía es ideal para los principiantes del Surf y otros deportes acuáticos… para mí es mejor ver a las personas como practican su deporte que hacerlo yo.
En Fuerteventura hay muchos molinos, es una tarea de otro viaje fotografiarlos, para ello tenemos que hacer una ruta diferente a la que tuvo éste viaje.
Este Monumento al Marinero está en el centro antiguo de la ciudad en la costanera; agradece a los hombres y mujeres de la Mar que en tiempos difíciles contribuyeron significativamente al desarrollo de Corralejo.
Un par de veces hicimos el recorrido a través de la playa desde el departamento hasta el muelle y una vez de noche. Ese sector es el más antiguo y ahí se encuentran los restaurantes para todos los gustos. El sector más bohemio tiene música a todo volumen y Tapas de preferencia para comer. Los restaurantes tradicionales están en la costanera. Nosotros elegimos El Sombrero Negro, que de día tenía las mesas directo al mar; para nosotros fue todo un festín poder comer pescado fresco todos los días.
Esta colorida escultura estaba en el parque frente al centro comercial El Campanario, donde íbamos a comprar nuestros víveres, hace honor a la Madre Tierra y su conexión hacia los seres humanos. Los colores representan Fuerteventura: arena, volcanes,tierra y sol. Esta foto fue la última que tomé en Corralejo, ese día íbamos hacia el aeropuerto para volver a casa.
